La Conmebol ha oficializado las sanciones para los jugadores de la selección de Uruguay involucrados en los disturbios que tuvieron lugar tras la derrota frente a Colombia en la semifinal de la Copa América 2024. Según el comunicado del máximo ente del fútbol sudamericano, las suspensiones y multas fueron impuestas por infringir los artículos 11.1 y 11.2 del Código Disciplinario, los cuales incluyen la prohibición de comportamientos violentos y agresivos en el ámbito deportivo.
Darwin Núñez es quien recibió la sanción más severa, con una suspensión de cinco partidos y una multa económica de 20.000 dólares. La pena del delantero del Liverpool será aplicada en los próximos partidos de las Eliminatorias Sudamericanas, lo que representa un duro golpe para la selección de Marcelo Bielsa en su camino hacia la Copa del Mundo de 2026.
Rodrigo Bentancur, por su parte, tuvo una suspensión de cuatro partidos y una multa de 16.000 dólares. Mathías Olivera, Ronald Araujo y José María Giménez también fueron sancionados con tres partidos y pagos de 12.000 dólares cada uno.
En cuanto al resto de los jugadores uruguayos involucrados en los incidentes, la Conmebol impuso castigos de 5.000 dólares a Sebastián Cáceres, Matías Viña, Emiliano Martínez, Brian Rodríguez, Santiago Mele y Facundo Pellistri. Estas penas también se basan en la infracción de los artículos 11.1 y 11.2 del Código Disciplinario, específicamente los literales c) y f), que se refieren a comportamientos que desacrediten al fútbol y a la Conmebol como organizadora de los torneos.
La sanción no se limitó únicamente a los jugadores. La Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) también fue multada con 20.000 dólares por "agresión colectiva, riña o tumulto", además de cualquier otra falta de orden o disciplina que ocurriera en el estadio o sus inmediaciones. Esta multa será descontada de los ingresos que la AUF reciba en concepto de derechos de televisación, participación o premios en torneos organizados por la Conmebol.
