Un viejo problema que aqueja a nuestra ciudad es el de sus dos basurales a cielo abierto.

Un problema no solo de ambiente sino también de salud, ya que cada vez que estos basurales se incendian, emanan partículas cancerígenas que afectan a todos los vecinos varillenses.

Pasan las gestiones y ninguno ha podido solucionar esta grave problemática, a pesar de haber prometido en campañas anteriores diversas soluciones.

En 2019, la actual gestión de Mauro Daniele, en plena campaña, decía que querían una ciudad amigada con el ambiente. Inclusive, la promesa era la construcción de una planta clasificadora.

El desafío estuvo entonces en manos del director de ambiente Pablo Ayala, y los resultados no fueron los esperados. Ya vamos por el segundo mandato y vemos cómo aquel viejo problema se repite y perjudica una vez más a todos los ciudadanos.

Esta vez, el desafío está en manos de Paulina Palmero, actual secretaria de ambiente, que hasta ahora no ha presentado ningún plan ni proyecto relacionado con los dos basurales que tenemos en nuestra ciudad.

Si no toman esta problemática tan dañina como una prioridad, las inversiones no van a existir.