
El fin de semana en Monza tuvo diferente clima para los pilotos españoles. Sainz tuvo el cielo despejado y logró su primer podio de la temporada pese a las borrascas en forma de ataques que le llegaban desde el box de su compañero de equipo, pero Fernando Alonso sufrió la fuerza de la DANA. La tormenta, que está haciendo estragos a su paso por Madrid y Toledo, se trasladó hasta Italia. Fernando Alonso en particular, y Aston Martin en general, tuvieron un fin de semana aciago y gris marcado por el nulo rendimiento del coche.
El asturiano calificó el sábado en su peor posición de esta temporada, décimo, y en la carrera únicamente pudo ganar una posición y acabar en el noveno puesto final. Fernando se bajó del monoplaza con la sensación de haber completado una carrera exigente que pasó desapercibida. “Es frustrante porque es una carrera muy dura, tanto mentalmente como físicamente. El coche tenía muy poco agarre. Unas de las carreras más difíciles del año, pero será anónima, nadie la recordará porque es el peor resultado. Yo sí me acordaré, porque ha sido muy dura”.
“Saco muchas lecciones de esta carrera. No fuimos competitivos, eso es lo más importante que tenemos que entender, qué hay que hacer diferente en este tipo de circuitos. Éramos lentos desde el inicio, no era posible luchar por más que un noveno puesto, así que tomamos los puntos y muchas lecciones. El coche, y la eficiencia del coche, no es la que deberían ser en este tipo de circuitos en los que el nivel de drag es relevante. Parece nuestro punto débil, lo sabemos, y tenemos que buscar ideas para resolverlo”, reflexionó.
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Los milagros de Alonso con el Aston Martin fuera de control
😰 Si en Zandvoort Fernando Alonso se sentía "conectado" con el coche, lo de hoy en Monza ha sido todo lo contrario.
No tenía grip en las Lesmos: "J*der, la curva 6 es horrenda".#F1 #ItalianGP 🇮🇹pic.twitter.com/Uu0IpeTRSV— Fórmula Directa (@FormulaDirecta) September 3, 2023
Una de esas lecciones que se lleva el asturiano de Monza sin duda la habrá sacado de la curva 6, la parte del circuito donde peor lo pasaba su AMR23. Todo el trazado en general chocaba con las características del monoplaza de Fernando, pero la mencionada zona se convirtió en la pesadilla de Alonso. Estuvo a punto de perder el control en varias ocasiones. Volantazos y hachazos estaban a la orden del día cada vez que pasaba por ahí. “Joder, pasar por la curva 6 es horroroso”, comunicó a su equipo por radio.
Sin apenas agarre, el asturiano estuvo a punto de irse a la grava en varias ocasiones. Solo los contra volantes y sus reflejos lo evitaron. El Aston Martin estaba fuera de control. El motivo era la baja carga aerodinámica. En rectas le permitía ganar velocidad, pero en las pocas curvas del circuito le obligaba a hacer malabares para evitar una salida de pista. Antes este escenario, Alonso optó por repetir una estrategia que realizó en el GP de Canadá, el lift and coast, es decir, dejar de acelerar y aminorar la velocidad justo antes de frenar y entrar en curva, para así no perder el coche, y aun así entraba casi de lado.
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El paquete aerodinámico, con el que subió al segundo cajón del podio la pasada semana en Países Bajos, volverá para el GP de Singapur, donde el trazado beneficia las características del AMR23, tal y como reconoce el propio Fernando Alonso: “Estamos haciendo el trabajo los domingos, ejecutamos y extraemos el máximo del coche. No cometemos errores. Buena estrategia, buenas paradas y ningún error grande como algunos de nuestros rivales al inicio del año. Ferrari ahora está delante de nosotros en el Mundial de constructores, pero volveremos en Singapur. Será mejor que Monza, pero ya sabemos lo difícil que es ganar una carrera con un Red Bull impresionante en cualquier gran premio. Espero que seamos rivales en Singapur. En los últimos dos circuitos urbanos, Alpine era muy fuerte en Mónaco y Ferrari en Bakú, con Leclerc en la pole. Veremos en Singapur”. Aún queda mucho Mundial y ni Aston Martin ni Alonso han dicho su última palabra.